¿Cómo puede ayudar el e-commerce a mi negocio?

El e-commerce es el nombre en inglés para designar al comercio electrónico, es decir, la compra-venta de productos y servicios a través de internet. La existencia del comercio electrónico se remonta a los años 20 con la venta por catálogo, que evolucionó hacia la televenta en los años 80 y dio el salto al internet en la década de los 90. Desde ahí la evolución de esta forma de negocio ha sido imparable, de manera que a las numerosas tiendas online que pueblan la red también se les llama negocios e-commerce.

Tal ha sido el desarrollo de este tipo de negocios que hay marcas que sustentan todo su éxito en su tienda online. Pero para llegar a esas cotas de éxito, hay que ponerse en manos de expertos, como los profesionales de way2ecommerce.com la consultoría ecommerce expertos en Magento y Magento Partners España. Entre sus servicios, además de consultoría, también se encarga del desarrollo de nuevas funcionalidades B2B y B2C, conectar las ventas online con ERPs, internacionalizar negocios, dar formación.

Qué tipos de e-commerce hay

Dependiendo del público al que va dirigido, y el modelo de negocio, se pueden distinguir hasta tres tipos de comercio electrónico: B2B, B2C y C2C. Cada uno de ellos con unos requerimientos diferentes, por lo que, cuando se buscan soluciones de comercio electrónico, lo primero que hay que mirar es ante qué tipo de negocio y público estamos. De esa manera se podrá desarrollar una web mucho más competente y eficiente. A continuación, se detallan las diferencias entre los distintos tipos de comercio electrónico.

En función del público al que va dirigida la tienda o negocio online

• B2B (Business to Business): El público de destino de este tipo de negocio no es el cliente final, sino otras empresas, por ejemplo, tiendas de equipamiento de hostelería, de materiales de oficina, de materiales de construcción, etc.
• B2C (Business to Consumer): Son negocios online dirigidos al cliente o consumidor final. Es quizá el tipo de tienda online más frecuente. Los ejemplos son infinitos, desde zapaterías online hasta tiendas de juegos de mesa, alimentos, moda ecológica, y un sinfín más.
• C2C (Consumer to Consumer): Es otro tipo de negocio que ha empezado a emerger con fuerza en los últimos años, donde son los propios consumidores los que venden y/o compran directamente a otros consumidores. Por lo general se trata de productos de segunda mano. Varios ejemplos son Vinted y Wallapop, por citar las dos plataformas más conocidas.

En función del modelo de negocio de que se trate

• Tienda online propia: En estos casos, una empresa decide crear una tienda digital a imagen y semejanza de su tienda físicas, o bien trabajar solo con la tienda online, sin disponer de tienda física. Aquí se engloba la mayoría de los negocios de comercio electrónico que conocemos y utilizamos casi a diario: supermercados, farmacias, herbolarios, tiendas de ropa, complementos, tiendas de bricolaje, y un largo etcétera.
• Marketplaces: Los marketplacesson una especie de centros comerciales virtuales que incluye a diversos vendedores. El Marketplace por excelencia es Amazon, que da cabida a numerosos vendedores que ofrecen sus productos en dicha plataforma a cambio de una comisión. Lo mismo ocurre con AliExpress, eBay, Fruugo, Privalia, Worten, Etsy, Manomano, etc.
• Dropshipping: El dropshippingno se diferencia a primera vista de cualquier otro negocio online estándar. Pero la diferencia está en que el propietario o propietaria de dicho negocio, no dispone de un stock o inventario real de los productos, sino que muestra y promociona, es decir, sirve de escaparate para una serie de productos, que una vez hecho el pedido, un tercero se encarga de hacer los envíos.

Además de los tres anteriores, también se podría considerar un modelo de negocio o comercio electrónico, las Suscripciones. Su funcionamiento se basa en ofrecer membresías mensuales a cambio de productos o servicios a domicilio. Un ejemplo podría ser Netflix, que ofrece contenido en streaming, pero también pueden ser productos físicos, productos digitales o servicios como por ejemplo gimnasios o entrenadores personales.

Ventajas del comercio electrónico

La primera ventaja que ofrece el e-commerce es dar un mayor alcance a los negocios. Con el comercio electrónico, una tienda online estará automáticamente accesible a cualquier hora y desde casi cualquier parte del mundo. Esto es imposible de conseguir con una tienda física por más que se invierta en publicidad. Las posibilidades de internet son muy superiores de cara a dar a conocer una marca que todas las estrategias tradicionales de marketing.

Por otro lado, se ahorra en costes, de hecho, montar una tienda online tiene un coste inicial muy bajo. En primer lugar, no hay que alquilar o comprar ningún local, que suele llevarse una parte importante de la inversión y de los ingresos. Esto a su vez aumenta el margen de beneficio, al tiempo que ahorra tiempo y quebraderos de cabeza buscando la zona que sea mejor para abrir la tienda o negocio.

Por supuesto, una tienda online está disponible 24/7 sin costes de personal añadidos, y por último su potencial de crecimiento es ilimitado. Cuanto mejor funcione la web, mayores posibilidades de aumentar su número de clientes y en consecuencia los beneficios.