10 errores por los que Twitter no funciona en tu estrategia de social media

Uno de los principales problemas de tu marca o negocio, por no decir el principal, es que ¡tu público objetivo no sabe que existes!

Gracias a las redes sociales, toda la estrategia de difusión de una marca se ha convertido en un proceso mucho más asequible, olvidándonos de la carísima publicidad en los medios tradicionales o el buzoneo poco efectivo.

Por eso, hoy más que nunca, es necesario que tengas desarrollada una estrategia de comunicación corporativa sin errores y un buen plan de social media que te permita llegar a tu público objetivo allá donde esté.

Pero además de tener un plan de social media, éste debe ser efectivo, generar engagement y llamar la atención de tus potenciales compradores.

Los medios de comunicación social te permiten, de manera gratuita o casi gratuita, buscar dónde se encuentran tus seguidores y obtener su atención para tu marca.

Pero como todo en esta vida, ese proceso exige cierta disciplina, creatividad e innovación para presentar una ventaja competitiva en tu estrategia.

Y es que, al haber un fácil acceso a estos canales, la competencia es brutal y por ello tienes que ser más hábil y aplicar métodos efectivos.

En este caso quiero hablarte de Twitter, la red social de microblogging que continúa teniendo, pese a que muchos la quieran enterrar, un gran potencial para llegar a tu público objetivo.

10 errores a evitar en Twitter para que funcione en tu plan de redes sociales

Estos son 10 errores que yo he cometido y que si los corriges harán cambiar las cosas en tu cuenta de Twitter y evolucionarán tu relación con los seguidores.

1. No publicas suficiente

Cuanto más publiques más oportunidades tendrán de llegar a ojos de tus fans y abrir una relación con ellos.

Twitter es una red social con mucha actividad por segundo y muy instantánea.

Por ello, debes aumentar el número de veces que compartes contenido, participas y generas imagen de marca en tu cuenta.

No tomes la red social del pajarito como un compromiso, no publiques una o dos veces al día y pongas en check en tu to do list.

Me atrevería a decir que debes publicar lo máximo que puedas. Obviamente no vas a estar 24 horas al día pendiente, pero existen mecanismos que lo pueden hacer por ti.

En No sin mis cookies ya te han hablado de Dlvr, la alternativa a TwiterFeed.

Así pues, aumenta el número de veces que publicas contenido y participas con tu audiencia en Twitter.

2. Los horarios de publicación son erróneos

Como te comentaba antes, la instantaneidad de Twitter es a nivel segundos con lo que la dificultad de llegar a tu público objetivo se multiplica por mucho.

Para esto tienes que averiguar en que franjas horarias son más efectivas tus publicaciones.

Para no estar con pruebas de ensayo y error continuamente, existen herramientas que te ayudan.

Te hablo concretamente de Twiteriod, una aplicación que analiza a tus seguidores y te saca un informe de la actividad a cada hora del día en cada día de la semana.

Así pues, si tus fans están más activos de los lunes y los jueves entre las 9 y las 11 horas, tendrás que estar mucho más presente en sus timeline en esa franja horaria.

¡Esto no quiere decir que sólo estés más activo esos días a esas horas!

Lo que tienes que hacer es buscar en el informe las franjas horarias más activas en cada día y centrarte en esas horas.

Debes publicar todos los días, recuerda eso.

¿Qué hacer si tus seguidores están activos entre las 2 y las 4 de la madrugada?

Esto puede pasar si tienes muchos fans de América Latina por ejemplo.

Pues la respuesta es sencilla: programación.

Yo utilizo Hootsuite y Twittimer, una opción de pago y otra gratuita, ambas igual de válidas.

Prueba trials y prueba aplicaciones gratuitas y decide cual se adapta mejor a tus necesidades.

3. Tu contenido no acaba de ser interesante… (hay que ser memorable)

Todo lo anterior dará un pequeño empujón a tu cuenta de Twitter pero no terminará de ser efectiva.

Necesitas contenido que enganche a tus fans.

Ese contenido es el que realmente te va a dar engagement.

La competencia es tan brutal que ni siquiera grandes marcas o medios de comunicación consiguen llamar la atención de sus lectores todo el tiempo.

La principal estrategia es hacer un análisis de tu competencia y ver cómo actúan (así se hace un buen análisis de tu competencia).

Apréndete de memoria sus cuentas, a que horas publican y qué tipo de contenido.

Cuánta actividad generan sus post, cuantos seguidores tienen… Conócelos mejor que a la palma de tu mano y así podrás ser mejor que ellos creando contenido más interesante.

En el título del punto digo: sé memorable porque si consigues alojarte en la retina de tu público objetivo tendrás mucho ganado.

Aquí comenzará tu idilio con él, aquí comenzará a valorarte y a ver que realmente le haces la vida más entretenida, más fácil o más divertida (según cual sea tu intención).

¿Cómo crear contenido memorable?

Pues no existe una fórmula mágica para eso. Lo mejor que puedes hacer es ver qué tipo de publicaciones le funciona a tu competencia y a los grandes influencers.

Investiga a los twitteros más destacados, a otras marcas y otros usuarios que tengan una filosofía de marca similar a la tuya y de quien puedas coger ideas.

Si a ellos les funciona, ¿por qué a ti no?

4. Tu cuenta parece un boot, totalmente automatizada

La automatización y programación de tus publicaciones es realmente una herramienta muy útil y que te ayudará a crear una gran masa de seguidores.

Pero como en todo, lo poco gusta y lo mucho cansa.

Una de los elementos más importantes que persiguen muchos encargados de comunicación es la humanización de su marca.

Buscan aproximarse a su cliente con personalidad propia, haciendo ver que detrás de un logotipo o un nombre hay una persona con sentimientos que trabaja por y para él.

Lo mismo sucede con una cuenta de Twitter. Los mensajes directos contestados por una persona y no por un robot serán mucho más efectivos.

Igual que twits conectados con la actualidad, las efemérides o las noticias.

Este tipo de contenido es una inequívoca muestra de que hay personas detrás de tu marca en Twitter.

No obstante, si sólo publicas contenido genérico, contestas mensajes de manera automáticas y retwiteas y das likes por cumplir el expediente, los seguidores te pillarán enseguida.

Dejarás de ser interesante y tu nombre pasará a la lista de cosas que le importante bien poco en su timeline o directamente te dejará de seguir.

Así pues, esto es como cocinar una receta: un poquito de automatización y programación semanal, estar conectado a la actualidad y ponerle mucho cariño a tus mensajes y twits.

5. Te centras en una temática demasiado concreta y no das variedad

Analiza tu propia cuenta de Facebook, Twitter o Instagram, ¿no te acabas aburriendo de aquellos que siempre comparten el mismo tipo de vídeo, fotos siempre sobre ellos o contenidos con frases motivadoras o críticas a los políticos?

Seguro que tienes un amigo en Facebook que está todo el día poniendo vídeos de política y piensas de él que es un ‘pesao’…

Pues a nivel marca sucede lo mismo.

Si tu perfil se centra únicamente en hablar de ti, de la actividad que realizas y de retwitear cuatro twits sobre esa temática… dejarás de ser interesante enseguida.

Mi recomendación para este tipo de asuntos es sencilla: si tienes perfil en redes sociales sabes qué cosas te gustan y cuales te aburren, ¿no?

Durante la próxima semana fíjate en qué perfiles y qué contenido te resulta interesante (sobre cualquier temática que sea de tu interés), cuál te paras a ver y de cuál pasas de largo.

Luego aplica esta experiencia a tu perfil de marca en Twitter.

Habrás aprendido que en la variedad está el gusto y que si puedes publicar sobre un amplio abanico de temáticas, aunque estén todas relacionadas con tu sector, serás más atractivo.

6. Tienes que ir a la gente para que la gente vaya a ti… (no esperes sentado)

Es muy complicado, por no decir imposible, que publicando unos cuantos twits al día, por mucho que el contenido sea de lo más interesante, que logres conseguir un gran número de seguidores.

Del mismo modo que la publicidad sirve a los comercios para atraer público a su local, tú tienes que utilizar algunas técnicas para atraer seguidores a tu perfil.

A un bar no le sirve únicamente tener comida buenísima, ya que necesita gente que consuma esa comida.

El boca-oreja servirá para que vayan más comensales porque la comida es buena.

Pero en el mundo de las redes sociales, con una competencia tan feroz, necesitamos algo más que buen contenido.

Por ello tenemos que ir a buscar al público. Para esto tienes diferentes posibilidades y combinándolas todas te irá mucho mejor.

Una de las más interesantes es la técnica por simbiosis con los perfiles influyentes de tu nicho.

¿Nunca te han hablado de ese pájaro que vive encima de los rinocerontes y se alimenta de los insectos que habitan en su piel?

Pues es una relación beneficiosa para ambos: el rinoceronte mantiene su piel limpia de garrapatas y otros insectos que pueden perjudicar a su salud y el pájaro se alimenta.

De alguna manera, una relación simbiótica entre un influyente de tu nicho en Twitter y tu propio perfil es beneficiosa para ambos, ya que tú te das a conocer a sus seguidores y él mantiene su estatus de influyente con tu llegada hasta él.

Por supuesto existen herramientas para encontrar a los influyentes de tu nicho en Twitter como Klout y otras para analizar a sus seguidores como Crowdfire.

7. ¿Estás añadiendo valor con tu contenido?

Como decía antes, la competencia en redes sociales es bestial, así que para destacar en el timeline de los twiteros necesitarás el mejor contenido.

Si publicamos contenidos que no aportan nada nuevo a lo que ya escriben otros, pasarás desapercibido, ya que a no ser que seas un influencer de tu nicho será muy complicado que te vean.

El público acudirá a ellos antes que a ti para leer un contenido similar. No obstante, si tus contenidos empiezan a ser más completos o tienen más beneficios que los de tu competencia…

Pues eso, comenzarás a ganar notoriedad.

¿Cómo puedes añadir más valor a tu contenido de Twitter?

• Contenido visual: infografías, vídeos explicativos, fotos atractivas
• Regalos de información: no te limites a poner un twit con el titular de tu nuevo post con un enlace, crea una serie de post con píldoras de información útil, curiosa o entretenida para tus seguidores al respecto de esa temática
• Facilita las cosas a tus lectores: un gran valor añadido sería subir un audio con el texto de tu post del blog leído. O con un vídeo explicativo. La gente podría leer tus contenidos mientras va en el coche o haciendo jogging. Twitealo y presume de estar a la última facilitando las cosas a tus seguidores.
• Utiliza todas las herramientas de Twitter: hashtag, likes, retweets y listas, de este último elemento te dejo el post 17 ideas para reinventar las listas y sacarles rendimiento.

8. Es demasiado pronto para lograr engagement, ten paciencia

Esto es bastante obvio pero a veces nos olvidamos.

Es lógico que si estás recién llegado a Twitter o nunca has utilizado el perfil con intención de lograr ventas, no tengas feeling con tus fans.

No puedes pretender ganar 2.000 seguidores en un mes, tener 100 retweets y menciones al día.

Tienes que ir paso a paso, marcándote objetivos realistas. Por ejemplo trata de conseguir 50 seguidores a la semana, 15 retweets y 10 menciones.

Conforme vayas logrando estos objetivos, ponte más exigente.

Trabaja semana a semana y verás como tus objetivos van convirtiéndose cada vez en más ambiciosos.

Evitarás frustrarte pensando en que tu cuenta de Twitter es inservible y además irás creciendo de manera natural, teniendo un desarrollo beneficioso para tus contenidos.

Lo dicho, plantéate objetivos semanales y poco a poco irás obteniendo grandes resultados.

9. Te centras demasiado en ti/tu marca

Este punto es una variable del número 5.

Si en él hablábamos de temáticas concretas, en este nos referimos a esas cuentas de personas que sólo suben selfies de sí mismo o que nos cuentan su vida cada hora del día.

Aplicado a marcas, y aunque no es tan sencillo de ver a estas alturas de desarrollo del social media, seguro que de manera subjetiva estás harto de algunas empresas.

¿Por qué?

Pues por anuncios repetitivos, patrocinios, porque sólo publican imágenes de sus logotipos o sus productos…

Intenta introducir tu marca de manera subversiva todas las veces que puedas pero que no se convierta en algo obligatorio.

Deja un poco de halo misterioso a tu alrededor e intenta que los nuevos seguidores que lleguen a ti tengan que investigar un mínimo para descubrir quién eres o qué vendes.

No digo que tengan que hacer una gincana para saber de ti, pero que si leen un twit tuyo que tengan curiosidad por entrar al perfil al menos.

En fin, que tu marca no se convierta en el ombligo del mundo de su cuenta de Twitter.

Habla de temáticas variadas dentro de tu sector e incluso atrévete a salir de él y comentar temas de actualidad, siempre evitando temas polémicos ya que pueden dañar tu imagen.

10. ¿Te olvidas del contenido visual?

Por favor, esto que no te pase.

Estúdiate a ti mismo y te darás cuenta que siempre llaman más tu atención las publicaciones visuales.

Esas publicaciones que vienen con una foto llamativa, una infografía interesante o un vídeo que mola.

Aplícate el cuento y dentro de tus posibilidades añade siempre contenido visual atractivo.

Está claro que si no tienes recursos no podrás poner súper vídeos en timelapse o fotografías panorámicas desde lo alto del Empire State.

Pero oye, dentro de tus posibilidades seguro que puedes añadir un contenido visual a Twitter de lo más interesante y que llame la atención de tus fans.

De vez en cuando añade el logotipo de tu marca y tus colores corporativos para que los seguidores comiencen a relacionar tu marca con el buen gusto visual.

Combina publicaciones con todo tipo de contenido visual para no aburrir a tus fans y prepara siempre el mejor producto para llamar su atención.

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Después de estos 10 consejos espero que tu perfil de Twitter comience a traerte tráfico hacia tu página web, que tu marca comience a ser más conocida y, en definitiva, que tus ventas aumenten.